¿Vacaciones?
No jodas.
Las vacaciones no se reservan. Se sienten.
Puedes volar mil kilómetros, dormir en hoteles de cinco estrellas, llenar Instagram de fotos…
y seguir igual de roto por dentro.
Porque el verdadero descanso no es una ubicación, es un estado mental.
Es apagar el móvil sin culpa.
Es desayunar sin mirar el reloj.
Es rodearte de quien te suma y mandar a la mierda el ruido.
Hoy no vengo a hablarte de maletas.
Hoy vengo a hablarte de lo que de verdad necesitas.
Bienvenido a este episodio.
Ponte cómodo.
Porque hoy… paramos de verdad.