Septiembre 29 - Tu Devocional para el día de hoy

"NECESITAS UNA PALABRA"

ISAÍAS 55:8-11

Porque mis pensamientos no son vuestros pensamientos, ni vuestros caminos mis caminos, dijo Jehová. Como son más altos los cielos que la tierra, así son mis caminos más altos que vuestros caminos, y mis pensamientos más que vuestros pensamientos. Porque como desciende de los cielos la lluvia y la nieve, y no vuelve allá, sino que riega la tierra, y la hace germinar y producir, y da semilla al que siembra, y pan al que come, así será mi palabra que sale de mi boca; no volverá a mí vacía, sino que hará lo que yo quiero, y será prosperada en aquello para que la envié.

Iba Jesús rumbo a Capernaúm cuando un Centurión se le acerco pidiendo ayuda para su siervo enfermo, Jesús deseo ir, más el Centurión supo que una palabra suya bastaría para ver el milagro; y es que una palabra de Jesús es lo que tu necesitas para ir adelante en tu vida; una sola palabra que recibas en tu corazón, con la fe suficiente para hacer la vida en ti y tu milagro esta hecho; como recibes esa palabra? En tu oración firme y con el conocimiento de Dios y de su gran amor por ti.

Busca esa palabra, se constante hasta obtenerla, y una vez que la tengas, no dudes un solo instante. Dios esta presto para ponerla por obra en todos tus caminos.

HAZ ESTA DECLARACIÓN!

"Hoy Declaro que abro los oídos de mi corazón para escuchar atentamente las palabras de Dios con una Fe determinada, sabiendo que tienen toda la autoridad del Cielo para obrar en mis caminos; Dios es Bueno, es Dios de amor y desea lo mejor para mi vida".

TEXTO BIBLICO

MATEO 8:5-13

Entrando Jesús en Capernaúm, vino a él un centurión, rogándole, y diciendo: Señor, mi criado está postrado en casa, paralítico, gravemente atormentado. Y Jesús le dijo: Yo iré y le sanaré. Respondió el centurión y dijo: Señor, no soy digno de que entres bajo mi techo; solamente di la palabra, y mi criado sanará. Porque también yo soy hombre bajo autoridad, y tengo bajo mis órdenes soldados; y digo a este: Ve, y va; y al otro: Ven, y viene; y a mi siervo: Haz esto, y lo hace. Al oírlo Jesús, se maravilló, y dijo a los que le seguían: De cierto os digo, que ni aun en Israel he hallado tanta fe. Y os digo que vendrán muchos del oriente y del occidente, y se sentarán con Abraham e Isaac y Jacob en el reino de los cielos; más los hijos del reino serán echados a las tinieblas de afuera; allí será el lloro y el crujir de dientes. Entonces Jesús dijo al centurión: Ve, y como creíste, te sea hecho. Y su criado fue sanado en aquella misma hora.