Octubre 5 - Tu Devocional para el día de hoy

"CREA CON TU BOCA"

—Les aseguro que, si tienen fe y no dudan —les respondió Jesús—, no solo harán lo que he hecho con la higuera, sino que podrán decirle a este monte: “¡Quítate de ahí y tírate al mar!”, y así se hará. (Mateo 21:21 NVI)

Si verdaderamente creyéramos en el poder que llevan nuestras palabras cambiaríamos abruptamente nuestro modo de hablar. Las palabras que decimos crean vida porque están cargadas de la unción de Dios en nosotros. Podemos hablar bendiciones en situaciones donde no se vean aun y crearlas así, podemos hablar éxito en el inicio de un proyecto, podemos hablar sanidad sobre huesos enfermos, podemos hablar amor donde haga falta y podemos hablar unión en medio de la división. Más también debemos saber que si hablamos mal este también se creará. Así que por más negativo que se vea el cuadro ponte de acuerdo con Dios y no con el enemigo de tu vida, habla lo que Dios habla y niégate a hablar maldición, fracasos, dolor y pobreza. Prueba y contempla como tu hablar potencializa tu caminar!

HAZ ESTA DECLARACIÓN!

“Declaro que hablo con sabiduría, con fe y con amor, y aun en momentos difíciles tomaré domino propio para cerrar mi boca a la maldición y transformar todo en bendición. Yo creo el futuro que anhelo.”

TEXTO BÍBLICO

Del fruto de la boca del hombre se llenará su vientre; Se saciará del producto de sus labios. La muerte y la vida están en poder de la lengua, Y el que la ama comerá de sus frutos. (Proverbios 18:20-21)

Vino, pues, palabra de Jehová a mí, diciendo: Antes que te formase en el vientre te conocí, y antes que nacieses te santifiqué, te di por profeta a las naciones. Y yo dije: ¡Ah! ¡ah, Señor Jehová! He aquí, no sé hablar, porque soy niño. Y me dijo Jehová: No digas: Soy un niño; porque a todo lo que te envíe irás tú, y dirás todo lo que te mande. No temas delante de ellos, porque contigo estoy para librarte, dice Jehová. Y extendió Jehová su mano y tocó mi boca, y me dijo Jehová: He aquí he puesto mis palabras en tu boca. Mira que te he puesto en este día sobre naciones y sobre reinos, para arrancar y para destruir, para arruinar y para derribar, para edificar y para plantar. (Jeremías 1:4-10)