En medio de los retos y las pruebas, Dios nos está guiando a un tiempo de mayor intimidad y búsqueda de Su presencia.Este mensaje nos recuerda que la oración no es una rutina, sino una relación viva con nuestro Padre, donde somos transformados por Su amor y Su Palabra.
Descubre junto a nosotros el secreto que Jesús reveló a sus discípulos: su poder, su paz y su propósito nacían de una vida constante de oración. A través de ejemplos de la vida de Jesús, de testimonios reales y de la enseñanza de la Palabra, aprenderemos que:
La oración es el lugar donde se renueva nuestra fe y nuestro carácter.
El desierto no es un castigo, es el espacio donde Dios nos habla más claramente.
Su presencia es el sustento que nunca falta, incluso en medio del dolor.
Si estás pasando por tiempos difíciles, si anhelas escuchar la voz de Dios o simplemente deseas fortalecer tu relación con Él, este mensaje es para ti.
Al final oraremos juntos y haremos dos llamados muy especiales:
- Para quienes quieren iniciar una relación con Jesús.
- Para quienes desean renovar su vida de oración y volver a Su presencia.
“Solo una cosa es necesaria… y María escogió la buena parte.” – Lucas 10:42