¿Qué podría resultar de un tórrido romance entre dos escritores? Una correspondencia digna de pasar a la historia. Aunque, según la leyenda, las cartas que recibió Emilia fueron quemadas por su hija, debido a que ella y Benito tenían una relación que no era muy bien vista en la época, las que ella redactó fueron halladas en 1889, y compiladas en el libro Miquiño mío.