El fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, afronta un juicio histórico ante el Tribunal Supremo, acusado de un posible delito de revelación de secretos.
Por primera vez en la historia de la institución, el fiscal general del Estado, se sienta en el banquillo.
Se le atribuye haber filtrado, el 13 de marzo de 2024, un correo electrónico confidencial en el que confesaba el fraude tributario por el que estaba siendo investigado para intentar llegar a un acuerdo con el Ministerio Público.
El jefe de la Fiscalía afronta el juicio después de haber superado varias peticiones de dimisión por estar imputado, procesado y por la reciente decisión del magistrado Ángel Hurtado de abrir el juicio en su contra.
La acusación pide para García Ortiz entre cuatro y seis años de prisión. Y es que a pesar del proceso judicial, el Gobierno ha decidido mantenerlo en el cargo, y el Supremo no ha ordenado su suspensión cautelar.
Fuentes de la Fiscalía, aseguran que García Ortiz tiene previsto asistir a todas las sesiones de la vista oral, y que no parece dispuesto a negarse a que se emita el juicio en directo.