Mientras continuamos nuestro estudio de los "Tesoros en el Desierto", esta semana vamos a ver las tentaciones de Jesús. Jesús fue llevado por el Espíritu al desierto para ser tentado por el enemigo. Cuando las tentaciones vienen en tiempos de pruebas y tribulaciones Dios tiene un plan y un propósito. Él quiere enseñarnos a resistir al enemigo y Él quiere derramar más del poder de Su Espíritu Santo sobre nuestras vidas. Como veremos en la vida de Jesús, las tentaciones vienen en el desierto pero grandes tesoros nos esperan cuando podamos vencer.