01.13.2021 - By CCE Valencia
Dios anhela nuestro desarrollo integral ilimitado. La meta es la plenitud de Cristo. Nuestra parte es obedecerle, vivir en dependencia del Espíritu Santo. Crecer no es opcional para el seguidor de Cristo. Habrá dificultades, cometeremos errores, trabajaremos mucho, pero tenemos la promesa de un día alcanzar aquello para lo que fuimos creados.