Vuelca la atención hacia el Cristo Interno, dentro de tu corazón, unifica tu Conciencia Crística con la Conciencia del Amado Maestro Jesús, El Cristo, y experimenta la entrega de la personalidad externa para que tome el comando en cada fibra de tu ser, disolviendo las ataduras de las creaciones humanas dentro de la pesada cubierta carnal y los vehículos internos…