Gracias a las diferentes modalidades de AIs, ya todos podemos ser artistas digitales sin saber mojar un pincel en tinta, o escritores de sesudas tesis sobre temas de los que no tenemos por qué conocer ni media palabra.
La AI ha llegado a nuestras vidas para hacernos la vida más fácil… ¿o para convertirnos en unos vagos redomados?