La preocupación sobre el crecimiento descontrolado de las IAs crece.
Sobre todo si ese crecimiento está basado en vulnerar los derechos de la información privada de los usuarios, o algo mucho más poderoso, los de copyright de las grandes agencias de contenido.
Pero Europa tiene el arma definitiva para derrotar a Skynet.
¿Bombas de pulsos electromagnéticos?
No, algo mucho más farragoso.
¡Burocracia!