Prohibido morir aquí es una novela sobre la vejez, sobre cómo la vida se va acercando a la muerte y sobre cómo es difícil prepararse para esos años que faltan. El hotel Claremont funciona como hogar de algunas personas a la espera del día final con una sola condición: nadie puede morir allí. La señora Palfrey es una de las residentes del hotel, en el que los días pasan a una velocidad tan lenta que asusta. Ella y Ludo, un chico joven que conoce en la calle, elaboran un plan para que él se haga pasar por su para los señores chismosos del hotel. La relación que ambos van forjando marca el ritmo de esta historia que busca, de alguna manera, entender la dinámica de los primeros encuentros y mostrar que el afecto a veces puede aparecer no como una construcción a lo largo de los años si no como algo que alguien necesita en un determinado momento.