Es tiempo de vacaciones y aprovecho para descansar un poco del calor que hay al sur de la Cordillera Cantábrica y venirme a la costa.
he madrugado para fotografiar el amanecer desde los Acantilado del Infierno, pero el amanecer no se va a producir porque está muy nublado, con lo cual hay que esperar a que haya más luz y hacer larga exposición diurna para ver el movimiento de las nubes y congelar el movimiento del mar, que tampoco está demasiado agitado.
También aprovecharemos para fotografiar alguna flor con mi nuevo objetivo macro de Canon y practicar con él para poder contaros mis impresiones en siguientes episodios.