Inmerso en el otoño, un otoño que, debido a la sequía estival, preveía corto y poco vistoso, y no ha sido tal, ha provocado que publique este episodio con unos días de retraso. Días de mucha actividad fotográfica, en la producción y en la postproducción.
Los bosques al sur de la Cordillera Cantábrica están muy bonitos y me estreso intentando fotografiar todo, porque todo me parece interesante para llevar a casa; acrecentado el estrés, también, con la situación climatológica que no ha permitido muchas sesiones tranquilas, pero bienvenida sea la lluvia, que además crea ambientes muy oníricos dentro del bosque.