No hay mucho que pueda decir que no se resuma en una sola palabra: ¡GRACIAS!

Cada uno de los días en los que grabé sola, o reuniéndome con más gente tan apasionada como yo fue como un oasis lejos de mis problemas, los quehaceres de la vida o cualquier otra cosa que sucediera allá afuera.

Cada reproducción, comentario, o invitado que pasó por este programa me dejó claro dos cosas:

Que quiero seguir haciendo esto por mucho tiempo, relatándoles las historias que me mueven y que han movido a otros alrededor del fútbol, y que no estoy sola, que somos muchos los que vivimos el Fútbol a todo pulmón.

Esperen una segunda temporada, porque vendremos con muchos más goles.

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