Este episodio es un breve resumen de lo que fue mi 2020 y de las lecciones aprendidas en él. ¡Ha sido un año duro para todos! Pero más allá de ver lo intenso que fue, quiero recalcar lo bueno y la forma en la que Dios hizo que cambiara de perspectiva ante los problemas. Quisiera especialmente dedicar este episodio a las personas a quienes doy las gracias durante los últimos minutos, que no son pocas, y finalmente decirle al 2021: si me vienes con sorpresas, la sorpresa te la a llevar tú, ¡yo ya estoy curada y entrenada! Pd: Sí, ya sé que hablo como si voy sin frenos en bajada, pero señores, ya no he grabado más en un estudio sino en casa con mi hijo de 3 años y no es fácil distraerlo y mantenerlo en silencio por tanto tiempo. No soy perfecta, soy mamá. Que los disfruten!! No olviden dar like, comentar y compartir