Si criticas a los ricos, jamás llegarás a ser como ellos, porque para ti es un modelo desagradable. Es importante que ahora, de forma definitiva, dejes de criticarlos; proponte aceptarlos para que puedas ser como ellos.
Nunca podrás ser como las personas que criticas. Admira a la gente rica. Evita criticarlos, admíralos.
Deja de pensar que obtuvieron su riqueza de forma ilegal, mejor admira la disciplina, la energía y la fuerza que impusieron para obtener los logros que hoy tienen. Si su carácter o personalidad no te gusta, no te centres en ello, evócate en sus logros para que puedas tener sus mismos logros.