O cómo tres jóvenes de extrema derecha causaron estupor a finales de setiembre de 1975 tras asesinar a una joven de la periferia pobre y casi acabar con la vida de otra, que se hizo la muerta en el maletero de un coche. Esta introducción a la masacre del Circeo va dedicada a las víctimas, Rosaria López y Donatella Colasanti.