Danieles en Babilonia
Nuestra fidelidad a Dios no debe ser condicionada, sin importar la situación debemos tener la firmeza para no postrarnos ante ninguna estatua, incluso cuando eso ponga en riesgo nuestra vida. Aún atravesando el valle de sombra de muerte, El Señor sigue siendo nuestro Pastor, aún cuando las cosas no sucedan como esperábamos, Él sigue siendo bueno.