El de Groucho es muy famoso (o eso dice la leyenda...), el de Beethoven... más bien intensito, y el de Mihura, tan irónico como su obra. Epitafio es una palabra griega por los cuatro costados, que, de la mano de su epi- inicial, nos lleva a hablar de lenguas de serpientes, panaderos horteras, personas sin mandíbula... y hasta de oro, incienso y mirra.