3 realidades transformadoras del Dios de segundas oportunidades
El pueblo de Israel tropezó, pero no quedó caído. Pablo nos recuerda en Romanos 11:7-12 que, aunque muchos rechazaron la gracia de Dios, ese tropiezo abrió la puerta de salvación a los gentiles y revela un Dios que no se da por vencido con nosotros. En este mensaje veremos 3 realidades transformadoras del Dios de segundas oportunidades: que Él puede darle propósito incluso a nuestros fracasos, que abre caminos donde parecía no haber salida, y que siempre tiene un plan mayor para bendecirnos y bendecir a otros a través de nosotros.