la tía más GRACIOSA de tota la contornà se sienta a charrar conmigo porque compartimos un rasgo muy PECULIAR: se intuye, se comenta, se rumorea que somos así de pizpiretas porque en nuestra infancia y adolescencia lo pasamos REGULINCHI. bullying, complejos físicos, rechazos amorosos... todo esto parece que no forma parte de nuestra historia porque lo hemos utilizado como parte de nuestro DISCURSO. ahora somos unas tías chulísimas pero, cabe preguntarse... seríamos así si de pequeñas hubiésemos estado más TRANQUILITAS?