#EnClaveDeFe 📻🎶⛪ En este XXIII Domingo del Tiempo Ordinario la liturgia nos recuerda que vivir en fraternidad no es fácil, ya que a veces herimos a los demás y a veces somos heridos por ellos. Por eso lo importante es estar reunidos en nombre de Jesús. Si Jesús está vivo en nosotros y entre nosotros, sabremos incentivar las cualidades del hermano pero también advertirlo de sus errores para darle la oportunidad de cambiar. La receta para convivir cristianamente es: la oración en común, la corrección fraterna y el perdón mutuo. Advertir a alguien es darle la oportunidad de cambiar de vida. Por eso, quien no es capaz de advertir a su hermano de sus errores, no lo ama de verdad.