En esta ocasión nos encontramos con el hermano Abraham Díaz, quien trabaja con el Comité Central Menonita en el área de inmigración en toda la frontera sur.

Charlamos largo, nos contó de su historia de vida, y por qué esta está tan relacionada con su llamado de servicio hacia las personas que hoy más sufren y que hoy son más vulnerables. En la conversación no fue difícil repasar y sentirnos profundamente conmovidos con la historia de Jesus.

¿Sabían que Él también fue migrante? No solo migrante, además un niño migrante, hijo de padres desposeídos de todo… ¿Se han puesto a pensar que cuando José y María llevaron al niño Jesús para Egipto atravesando el desierto (que familiar suena todo esto con nuestros días), no es que llevaran mucho con ellos… A ver, tuvieron a su hijo en un establo. Eran pobres entre los pobres.