Hoy hablamos de ese momento incómodo, silencioso y profundamente real…
cuando sabes que ya no encajas en quien eras, pero todavía no sabes del todo quién estás siendo. Cambiar duele.
Duele soltar versiones antiguas de ti.
Duele ver que tus reacciones ya no son las mismas.
Duele sentirte desconectado, confundido o incluso irritado con los que amas.
Pero ese dolor no es señal de fracaso.
Es señal de que estás evolucionando. En este episodio te comparto cómo he vivido esa incomodidad interna, cómo prácticas como la lectura, el deporte, la escritura matutina y el silencio me han ayudado a sostenerme…
y por qué vale la pena incomodarte por ser fiel a quien estás llamado a ser.
www.josuenikao.com
[email protected]Spotify: Lunes de mentor