La valentía no tiene por qué venir de ti, a veces la descubrimos gracias a otros que nos empujan. Eso es la valentía: ponerse en marcha (al inicio) y seguir luchando (después).
La valentía no tiene por qué venir de ti, a veces la descubrimos gracias a otros que nos empujan. Eso es la valentía: ponerse en marcha (al inicio) y seguir luchando (después).