En el libro de Hechos vemos el carácter de la iglesia primitiva, un carácter definido por cuatro disciplinas espirituales muy importantes: el estudio de la Palabra, la comunión, la liturgia y la oración. De la experiencia de esa primera iglesia podemos aprender que las congregaciones que practiquen habitualmente esas disciplinas podrán disfrutar de la unidad, los milagros, la gracia y el crecimiento que experimentó la comunidad de Hechos. Esta semana veremos la importancia de tener relación con los demás creyentes más allá de las actividades de la iglesia, y algunas formas de hacerlo.
Hechos 2:42-47