A lo largo de las décadas, la comunidad cultural de México ha visto consolidarse a dos galardones, que han servido como un indicador confiable de la evolución y ambición de las letras mexicanas: el Premio Xavier Villaurrutia, a la mejor obra literaria publicada en un año, y el Premio Alfonso Reyes, a una trayectoria dedicada al género ensayístico. Esta es la historia de sus grandes promotores.