En la ficción, todos podemos ser asesinos
No es raro que cuando uno lee una historia se identifique con algún personaje, más allá de su conducta, incluso cuando el personaje es un asesino serial.
En la novela El perfume, historia de un asesino, del escritor alemán Patrick Süskind, conocemos a Jean-Baptiste Grenouille, un huérfano devenido en perfumista que quiere lograr una esencia única combinado el olor de 25 adolescentes vírgenes a quienes mata para poder extraerles el aroma. Una historia brutal que refleja su tiempo.