“Ser” es presente pero al mismo tiempo nos condiciona a reflexionar el eterno presente de lo que soy en mi vida. Este capítulo nos habla de una metáfora, el orgullo, los colores, la empatía y la fuerza. Ser de colores no sólo evoca a una comunidad, evoca nuestra necesidad de ser algo en la vida, sin necesidad de agradarle a un ser divino; ser orgulloso de nuestro presente no es fácil pues nuestros fantasmas del pasado y futuro nos condiciona, pero lo más importante es sentirte orgullosa y orgulloso de tu presente, y ver cómo has logrado cosas maravillosa. El lema de esta temporada es nunca olvidar que todos somos una escultura de glitter, el cual nos invita a cumplir una tarea sencilla y que nunca debemos olvidar “Simplemnte Brilla"