El Señor nos instruye sobre el adulterio, sobre el divorcio, nos insta a que no elevemos juramentos, a no tomar venganza por nuestra propia mano y por sobre todo a amar a nuestros enemigos.
El Señor nos instruye sobre el adulterio, sobre el divorcio, nos insta a que no elevemos juramentos, a no tomar venganza por nuestra propia mano y por sobre todo a amar a nuestros enemigos.