En la carta del dia de hoy hablo sobre la sinceridad, pero no la sinceridad para con el otro sino para con nosotros mismo. La sinceridad y la hipocresía son como el Ying y el Yang, no existe una sin la otra. No es ser sincero solo para hacer daño, que es lo que mucha gente erróneamente se otorga, como un valor, "yo soy sincero y duele", no eres un hijo de puta que no sabe expresar las cosas. Espero les guste este episodio.