La memoria, se mueve muy bien entre sombras porque ha aprendido a arrastrarlas desde su oscuridad hacia el mundo de la luz. Algo imposible para nuestra existencia corporal, no mi imagino a una persona por fuerte que sea, que se amague al suelo e incorpore la débil sustancia de su sombra hasta el plano vertical y que luego la devuelva a la naturaleza de la que salió.
La memoria en cambio, a su manera es capaz de conseguir algo parecido, transformar la sombra en luz y el recuerdo en algo similar a la existencia.
Evocaciones también de la mano de la música.