Hoy quiero hablarte de algo que está ocurriendo delante de nuestros ojos, pero que muchos aún no alcanzan a ver del todo: el control social a través de la Inteligencia Artificial y la lucha de los países por dominar esta tecnología. Nos vendieron la IA como un avance que haría nuestra vida más fácil. Un asistente para tareas, una herramienta para mejorar la productividad, algo que nos ayudaría en el día a día. Pero la realidad es que la IA es mucho más que eso. Es la mayor arma de control de la historia. Nunca un sistema había sido capaz de analizar, predecir y manipular el comportamiento humano con tanta precisión. Y mientras nosotros seguimos entretenidos con sus funciones más básicas, los gobiernos y las grandes corporaciones están en una guerra silenciosa por ver quién la controla antes.