Un día especial el de hoy que ayuda en ese caminar que añade pasitos en nuestro libro de diario en un suma y sigue que construye nuestra historia de comunicación social. Una historia que comenzó hace ya casi diez años y que hoy da un salto cuantitativo y cualitativo. Cuantitativo porque ampliamos la duración del programa, y cualitativo, porque hoy comienza una nueva andadura en Onda Local de Andalucía, la emisora de radio pública, hija de la EMA-RTV o lo que es lo mismo, la Asociación de Emisoras Municipales y Ciudadanas de Andalucía de Radio y Televisión, que también es una Agencia de Noticias Locales y Ciudadanas de Andalucía. Todo un sugerente reto, el habernos incorporado para la temporada radiofónica 2020-2021.
Y comenzamos esta nueva etapa con dos compañeras de una organización de la que yo misma hago parte. Me refiero a Women’s International League for Peace and Freedom, o lo que es igual, la “Liga Internacional de Mujeres por la Paz y la Libertad”, conocida por sus siglas en inglés “WILPF”. Dos mujeres feministas académicas y luchadoras. Dos mujeres que han convertido la resolución pacífica de los conflictos en una opción de vida por la paz. Ellas, conscientes de la importancia de estar organizadas y coordinadas con otras mujeres feministas y con visión internacionalista para poder abordar y transformar las situaciones de conflicto armado y las situaciones de injusticia social y violación de derechos humanos, por supuesto, todo con perspectiva de género. Un día decidieron juntarse con otras compañeras y, además de hablar y transferir conocimientos, pasaron a la acción. Ellas son Laura Alonso Cano y Manuela Mesa, Presidenta y Vicepresidenta de WILPF España.
El 28 de abril de 1915, nueve meses después del comienzo de la I Guerra Mundial, se celebró en La Haya el “I Congreso Internacional de Mujeres”. Bajo la presidencia de la estadounidense Jane Addams, 1.136 mujeres de distintas culturas, lenguas y tendencias, procedentes de 12 países -incluso enfrentados entre sí en el conflicto-, se reunieron, desafiando los peligros y obstáculos del escenario bélico, en busca de la paz. Durante cuatro días, estas mujeres valientes y comprometidas, convencidas de que el logro de la paz, la igualdad y la justicia para todas y todos, eran objetivos inseparables, debatieron y denunciaron el horror de la guerra, elaboraron estrategias de paz e intentaron encontrar un mecanismo de mediación inmediato para detener la matanza.
De este Congreso surgieron varias iniciativas que urgían a los gobiernos del mundo a poner fin a la terrible guerra, y construir una paz permanente y con justicia. Sin duda, marcó el inicio del movimiento internacional de mujeres por la paz, del feminismo pacifista y antimilitarista con vocación internacionalista. Y fue el origen de la Liga Internacional de Mujeres por la Paz y la Libertad (WILPF).