Sí, siempre ha habido mujeres que cambiamos el mundo con nuestros actos, con nuestra presencia, con nuestra palabra. Mujeres reales, con historias ciertas. Mujeres inteligentes, sabias, como nuestra invitada de hoy, la politóloga y escritora Nazanín Armanian, quien tuvo que huir de su país para refugiarse en el nuestro, con fortuna para nosotros y nosotras por todo lo que nos está aportando. Una mujer que no cuenta cuentos como Sherezade, que consiguió reeducar a un monarca misógino y asesino, pero que sí narra hechos y realidades después de analizarlos para ayudarnos a comprender qué hay en el escaparate y en la trastienda de las relaciones internacionales entre Estados y pueblos y qué consecuencias emanan de todo ello. Una mujer igualmente dotada de unas alas que no se ha dejado arrebatar. Unas alas que utilizó para emprender el vuelo hacia tierras lejanas, cruzando "siete cordilleras sin cumbres, siete mares sin orillas y siete desiertos sin límites", cargada con una mochila que poco a poco y sin remilgos nos ha dejado ver y nos comparte.