En la actualidad podemos distinguir dos tipos de segmentos dentro del cuerpo de Cristo:
1) que está rechazando a cuanto predicador haya que se llegue a equivocar en alguna prédica, o que sea acusado de una motivación incorrecta (avaricia, vanagloria, etc.), o de manifestaciones y expresiones fuera de lo que tradicionalmente se conoce en la iglesia; y 2) el grupo que está escuchando a cuanto predicador sin discriminar en lo absoluto.
Uno podría concluir fácilmente que ambos extremos son malos, pero ¿cómo discernir el punto medio? ¿cómo saber cuando llegar a rechazar un predicador o todavía seguir escuchándolo? y para colmo esto está trayendo divisiones dentro del cuerpo de Cristo, unos menospreciando a otros porque “se contaminan” con tal o cual predicador o tipo de iglesia, y otros condenando a los que los menosprecian.
Gracias a Dios que nos da por medio de su palabra los criterios que tenemos que tomar en cuenta para emitir un justo juicio. Veamos cuales son:
No esperes infalibilidad.
11 Pues bien, cuando Pedro fue a Antioquía, le eché en cara su comportamiento condenable. 12 Antes que llegaran algunos de parte de Jacobo, Pedro solía comer con los gentiles. Pero cuando aquéllos llegaron, comenzó a retraerse y a separarse de los gentiles por temor a los partidarios de la circuncisión. 13 Entonces los demás judíos se unieron a Pedro en su hipocresía, y hasta el mismo Bernabé se dejó arrastrar por esa conducta hipócrita.14 Cuando vi que no actuaban rectamente, como corresponde a la integridad del evangelio, le dije a Pedro delante de todos:
«Si tú, que eres judío, vives como si no lo fueras, ¿por qué obligas a los gentiles a practicar el judaísmo?15 »Nosotros somos judíos de nacimiento y no “pecadores paganos”. 16 Sin embargo, al reconocer que nadie es justificado por las obras que demanda la ley sino por la fe en Jesucristo, también nosotros hemos puesto nuestra fe en Cristo Jesús, para ser justificados por la fe en él y no por las obras de la ley; porque por éstas nadie será justificado. (Gálatas 2:11-16)
¿Los líderes de la iglesia son infalibles? Aquí tenemos el caso de Pablo reprendiendo a Pedro y a Bernabe por no actuar de acuerdo al evangelio, y por inducir a los gentiles a judaizar. Esto nos muestra que tenemos que estar conscientes que los líderes se pueden equivocar. Pueden hacer cosas que están incorrectas delante de Dios. En este caso Pablo los reprendió y atendieron a la reprensión, pero, ¿qué debe hacer uno con dicho liderazgo en el “inter” de que llega alguien a reprenderlo y continua en su error? –porque siempre hay un “tiempo” en que dicho liderazgo esta en dicho error hasta que llega la reprensión, la revelación y el cambio. En este caso fueron días, pero pueden ser semanas, meses o años…. ¿que hacer en el inter cuando el liderazgo no predica un mensaje de acuerdo a la integridad del evangelio? ¿Se le deben rechazar inmediatamente? ¿se les deja de seguir? ¿Debe cambiar uno de iglesia ante la primera equivocación? En este caso tenemos que el evangelio de Marcos fue dictado por Pedro, ¿debemos rechazar el evangelio de Marcos por este error de su parte? Se cree que Bernabé escribió la carta a los Hebreos ¿Debemos de rechazar también dicha carta por este error?
Nótese que este error en el caso de Pedro y Bernabé, estaba a llevando a los gentiles conversos a judaizar, algo que Pablo reprende severamente en su carta:
“Escuchen bien: yo, Pablo, les digo que si se hacen circuncidar, Cristo no les servirá de nada . 3 De nuevo declaro que todo el que se hace circuncidar está obligado a practicar toda la ley. 4 Aquellos de entre ustedes que tratan de ser *justificados por la ley, han roto con Cristo; han caído de la gracia. 5 Nosotros, en cambio, por obra del Espíritu y mediante la fe, aguardamos con ansias la justicia que es nuestra esperanza. 6 En Cristo Jesús de nada vale estar o no estar circuncidados; lo que vale es la fe que actúa media[...]