
Sign up to save your podcasts
Or
CUANDO DIJISTE: BUSCAD MI ROSTRO, MI CORAZÓN TE RESPONDIÓ: TU ROSTRO, SEÑOR, BUSCARÉ
Salmos 27:8 LBLA
Cuando dijiste: Buscad mi rostro, mi corazón te respondió: Tu rostro, SEÑOR, buscaré.
Es la invitación que Dios hace a cada uno de nosotros: “Buscad mi rostro”.
Y es la respuesta que cada uno debe tener: “Mi corazón te respondió: Tú rostro, Señor, buscaré”.
Esta es la sociedad perfecta: ¡Dios y tú; tú y Dios!
CUANDO DIJISTE: BUSCAD MI ROSTRO, MI CORAZÓN TE RESPONDIÓ: TU ROSTRO, SEÑOR, BUSCARÉ
Salmos 27:8 LBLA
Cuando dijiste: Buscad mi rostro, mi corazón te respondió: Tu rostro, SEÑOR, buscaré.
Es la invitación que Dios hace a cada uno de nosotros: “Buscad mi rostro”.
Y es la respuesta que cada uno debe tener: “Mi corazón te respondió: Tú rostro, Señor, buscaré”.
Esta es la sociedad perfecta: ¡Dios y tú; tú y Dios!