Mejor es para nosotros cuando nuestro deber se nos hace natural. Por cierto, esto es sinceramente y no sólo por pretensión; con corazón dispuesto y puntos de vista rectos. Nuestra tendencia es preferir nuestro propio mérito, comodidad y seguridad antes que la verdad, la santidad y el deber, pero Timoteo no era así. Pablo deseaba libertad no para darse placeres, sino para hacer el bien. | Pr. Pablo Uribe.