En este mundo, todo es pasajero, el dinero, las riquezas, la gloria, incluso, los momentos tristes y difíciles. Pero, la integridad y la rectitud jamás pasarán, porque ellas preservan a los que eligen confiar en Dios.
En este mundo, todo es pasajero, el dinero, las riquezas, la gloria, incluso, los momentos tristes y difíciles. Pero, la integridad y la rectitud jamás pasarán, porque ellas preservan a los que eligen confiar en Dios.