Don Diego Ramírez de Villaescusa fue un personaje tremendamente influyente durante los últimos años del siglo XV y el primer tercio del siglo XVI en ámbitos tan variados como el religioso, el político y el cultural.
Y aunque en su época fue bien valorado por sus contemporáneos, con el tiempo su figura se ha ido diluyendo hasta prácticamente desaparecer del primer plano histórico.