Cuando nosotros nos vanagloriamos en nosotros mismos corremos el riesgo de desconocer la obra de Dios en nuestras vidas y seguramente será ese el momento en que el Señor nos traerá a la realidad de una forma convincente
Cuando nosotros nos vanagloriamos en nosotros mismos corremos el riesgo de desconocer la obra de Dios en nuestras vidas y seguramente será ese el momento en que el Señor nos traerá a la realidad de una forma convincente