En medio de tu problema, Dios esta llevando a cabo un plan más grande que tu problema.
¿Cuál es tu problema? Cualquiera que sea ¡Esto no será lo último! Tus cabellos están contados, tus pasos ordenados, tu le perteneces a Dios.
El Señor te dice: ¡No te asustes! Yo voy a usar tu problema, para mi gloria!