
Sign up to save your podcasts
Or
Te doy la bienvenida a un nuevo episodio de tu podcast: ¡Superando la diabetes!
Fui diagnosticada con diabetes tipo uno, en este espacio, comparto mi proceso de aprendizaje, las estrategias que me han funcionado para manejar el diagnóstico, los nuevos hábitos, reflexiones, y acompañamiento.
Mi nombre es Mabel, estoy aquí para inspirarte y mostrar otros caminos; ¡Quédate y entérate cómo nos podemos ir…por encima del diagnóstico!
En esta ocasión quiero traer a tu atención algo que me sucedió ayer. Sabes, he dicho que trabajo en servicio al cliente. Y converso con muchos de ellos mientras le despacho lo que necesitan. Trabajar a veces puede resultar agotador, físicamente, y trabajar con público también unos muy serios, otros sonrientes, algunos complacidos y otros nunca satisfechos. ¡Así es! Todos los días.
Por eso y por todo, acostumbro a renovar mi energía cada día: oro, estoy haciendo ejercicio físico (no tanto como debería, pero estoy activa) agradezco, me visualizo en bienestar total y gestiono todo lo que requiere tener una pompa microdifusora de insulina.
Primero, para ponerte un poco en contexto: Hace poco, en un lugar en donde yo participaba de una conferencia, una joven con vitíligo me saludó y me dijo somos hermanos (refiriéndose claramente al vitíligo y me mostró sus manos). Ese saludo me dejó pensando y casualmente o inconscientemente debo decir, se me quedó grabado.
Estaba ayer atendiendo a una cliente y le veo la máquina microdifusora de insulina en su cinturón y espontáneamente le dije: “somos hermanas” y le mostré la máquina que también yo la llevo en la cintura.
Ella, se veía feliz y al yo saludarle de esa forma siguió sonriendo y me preguntó: ¿Y cómo te va con la máquina?
Ayy estoy cansada, pero estoy bien. Eso fue lo que contesté y antes de terminar la frase ya estaba arrepentida de haberle contestado de esa forma. No quiero decir que estoy cansada y, lo dije sin pensar tan siquiera.
Así que dos segundos después me dije: ¡Queeee! No puede ser,
sí es cierto que te cansas, entonces, encuentra espacios para descansar. Si es cierto que no quieres escuchar los: “Tú no puedes comer eso”, entonces predisponte positivamente y piensa que quiere esa persona de Ti o para Ti. Si es cierto que te cansas de seguir en análisis, en citas, en procesos y tratamientos, entonces recuerda que estas vivo y que tu vida tiene un propósito, aunque aún por momentos no seas consciente de eso.
Puede que estés cansado, pero no alimentes tus pensamientos con cansancio. Luego que se fue la dama, me pregunté: ¿Es verdad que sientes cansancio? ¿O es que piensas en que te agota gestionarlo todo?
Dieta, ejercicio, tratamiento, salud emocional, desarrollo personal, espiritualidad, relaciones, sustento del hogar.
No, nada de eso me agota. Esos son mis procesos, esa es mi vida, y vivo cada uno de esos procesos en alegría. No estoy cansada de vivir. Entonces, porqué contesté de esa manera: ¿Por mala costumbre? ¿O porque he dejado colar por ahí algunos pensamientos negativos?
Concluyo, es que, bien profundamente, todavía, emocionalmente tengo que seguir trabajando con el hecho de que hay un diagnóstico.
Mi psicóloga dice que todos tenemos momentos de estar arriba: optimistas, fuertes y momentos de estar abajo: sin esperanza, vulnerables. Si, Todo el mundo
Hoy te invito a gestionar el descanso. Así como me autoinvito a meditar, a hacer contacto con la naturaleza, escuchar música y recargarme de energía. Te invito a Ti también, has más de eso que te desconecta de la preocupación, has mas de eso que te hace reír, es una forma de descansar, de vaciar tu mente y seguir en tu día a día consciente y feliz.
Porque si un pensamiento negativo por lo general te debilita y se interpone en tu camino de mejorar tu salud. Hay que tomar acción, tomar la decisión de modificar, ¿Qué te parece? ¿Lo hacemos juntos?
Bien esto fue lo primero que hice: Confronté el pensamiento: ¿Realmente me siento cansada de los procesos, gestionando mi diabetes? No, no es así, aunque haya días de problemas técnicos con la máquina, tengo evidencia de que lo supero cada día.
Entonces vamos a ver qué otras cosas podemos hacer adicional a confrontar el sentimiento o pensamiento negativo.
Pregúntate: ¿Qué puedes aprender de ese malestar? Si porque ese pensamiento te causa malestar, a mí me causa malestar y lo que aprendo como te mencioné, es que aún hay emociones con relación a la diabetes que tengo que trabajar.
Así que te invito a estar atento. Atiende lo que dices, tus palabras son poderosas. Cada vez que te escuches decir algo que no es congruente con lo que quieres en tu vida, corrígelo, cambia esas palabras, transforma esa línea y repite la línea de forma que te construya. Cada palabra es una afirmación, no es lo mismo decir: “esto me tiene harto” que decir: “en ocasiones se pone difícil, pero soy mas fuerte que la situación y voy bien”
Lo dejo hasta aquí por hoy, confiando en que estés excelentemente bien, gestionando tu diagnóstico cada día. Me encanta acompañarte y que sigamos juntos. Recuerda que puedes escribirme por mensaje directo en IG a @hola.vidaenpositivo. Comparte este podcast con familiares y amigos en tus redes sociales también, para que se beneficien más personas.
Deja tu valoración y suscríbete, así no te perderás los próximos episodios.
¿Nos vamos por encima del diagnóstico? ¡Claro que si!
Te doy la bienvenida a un nuevo episodio de tu podcast: ¡Superando la diabetes!
Fui diagnosticada con diabetes tipo uno, en este espacio, comparto mi proceso de aprendizaje, las estrategias que me han funcionado para manejar el diagnóstico, los nuevos hábitos, reflexiones, y acompañamiento.
Mi nombre es Mabel, estoy aquí para inspirarte y mostrar otros caminos; ¡Quédate y entérate cómo nos podemos ir…por encima del diagnóstico!
En esta ocasión quiero traer a tu atención algo que me sucedió ayer. Sabes, he dicho que trabajo en servicio al cliente. Y converso con muchos de ellos mientras le despacho lo que necesitan. Trabajar a veces puede resultar agotador, físicamente, y trabajar con público también unos muy serios, otros sonrientes, algunos complacidos y otros nunca satisfechos. ¡Así es! Todos los días.
Por eso y por todo, acostumbro a renovar mi energía cada día: oro, estoy haciendo ejercicio físico (no tanto como debería, pero estoy activa) agradezco, me visualizo en bienestar total y gestiono todo lo que requiere tener una pompa microdifusora de insulina.
Primero, para ponerte un poco en contexto: Hace poco, en un lugar en donde yo participaba de una conferencia, una joven con vitíligo me saludó y me dijo somos hermanos (refiriéndose claramente al vitíligo y me mostró sus manos). Ese saludo me dejó pensando y casualmente o inconscientemente debo decir, se me quedó grabado.
Estaba ayer atendiendo a una cliente y le veo la máquina microdifusora de insulina en su cinturón y espontáneamente le dije: “somos hermanas” y le mostré la máquina que también yo la llevo en la cintura.
Ella, se veía feliz y al yo saludarle de esa forma siguió sonriendo y me preguntó: ¿Y cómo te va con la máquina?
Ayy estoy cansada, pero estoy bien. Eso fue lo que contesté y antes de terminar la frase ya estaba arrepentida de haberle contestado de esa forma. No quiero decir que estoy cansada y, lo dije sin pensar tan siquiera.
Así que dos segundos después me dije: ¡Queeee! No puede ser,
sí es cierto que te cansas, entonces, encuentra espacios para descansar. Si es cierto que no quieres escuchar los: “Tú no puedes comer eso”, entonces predisponte positivamente y piensa que quiere esa persona de Ti o para Ti. Si es cierto que te cansas de seguir en análisis, en citas, en procesos y tratamientos, entonces recuerda que estas vivo y que tu vida tiene un propósito, aunque aún por momentos no seas consciente de eso.
Puede que estés cansado, pero no alimentes tus pensamientos con cansancio. Luego que se fue la dama, me pregunté: ¿Es verdad que sientes cansancio? ¿O es que piensas en que te agota gestionarlo todo?
Dieta, ejercicio, tratamiento, salud emocional, desarrollo personal, espiritualidad, relaciones, sustento del hogar.
No, nada de eso me agota. Esos son mis procesos, esa es mi vida, y vivo cada uno de esos procesos en alegría. No estoy cansada de vivir. Entonces, porqué contesté de esa manera: ¿Por mala costumbre? ¿O porque he dejado colar por ahí algunos pensamientos negativos?
Concluyo, es que, bien profundamente, todavía, emocionalmente tengo que seguir trabajando con el hecho de que hay un diagnóstico.
Mi psicóloga dice que todos tenemos momentos de estar arriba: optimistas, fuertes y momentos de estar abajo: sin esperanza, vulnerables. Si, Todo el mundo
Hoy te invito a gestionar el descanso. Así como me autoinvito a meditar, a hacer contacto con la naturaleza, escuchar música y recargarme de energía. Te invito a Ti también, has más de eso que te desconecta de la preocupación, has mas de eso que te hace reír, es una forma de descansar, de vaciar tu mente y seguir en tu día a día consciente y feliz.
Porque si un pensamiento negativo por lo general te debilita y se interpone en tu camino de mejorar tu salud. Hay que tomar acción, tomar la decisión de modificar, ¿Qué te parece? ¿Lo hacemos juntos?
Bien esto fue lo primero que hice: Confronté el pensamiento: ¿Realmente me siento cansada de los procesos, gestionando mi diabetes? No, no es así, aunque haya días de problemas técnicos con la máquina, tengo evidencia de que lo supero cada día.
Entonces vamos a ver qué otras cosas podemos hacer adicional a confrontar el sentimiento o pensamiento negativo.
Pregúntate: ¿Qué puedes aprender de ese malestar? Si porque ese pensamiento te causa malestar, a mí me causa malestar y lo que aprendo como te mencioné, es que aún hay emociones con relación a la diabetes que tengo que trabajar.
Así que te invito a estar atento. Atiende lo que dices, tus palabras son poderosas. Cada vez que te escuches decir algo que no es congruente con lo que quieres en tu vida, corrígelo, cambia esas palabras, transforma esa línea y repite la línea de forma que te construya. Cada palabra es una afirmación, no es lo mismo decir: “esto me tiene harto” que decir: “en ocasiones se pone difícil, pero soy mas fuerte que la situación y voy bien”
Lo dejo hasta aquí por hoy, confiando en que estés excelentemente bien, gestionando tu diagnóstico cada día. Me encanta acompañarte y que sigamos juntos. Recuerda que puedes escribirme por mensaje directo en IG a @hola.vidaenpositivo. Comparte este podcast con familiares y amigos en tus redes sociales también, para que se beneficien más personas.
Deja tu valoración y suscríbete, así no te perderás los próximos episodios.
¿Nos vamos por encima del diagnóstico? ¡Claro que si!