Para muchos rusos este animalito tan precioso es el animal más famoso de Rusia y el más querido. Por desgracia el mundo cambió para siempre y los niños modernos de hoy sí que saben quién es, pero... ya no lo adoran y no juegan con él como algunos adultos (como yo, por ejemplo, que guardo con mucho cariño mi peluche que viajó desde Rusia para quedarse conmigo en España).