La noche del 9 de enero de 1999, aproximadamente 150 paramilitares del Bloque Sur
Putumayo, unidad adscrita al Bloque Central Bolívar—BCB— de las Autodefensas Unidas de
Colombia (AUC), irrumpieron en la zona urbana de la Inspección de Policía El Tigre, en el
Bajo Putumayo (Valle del Guamuéz), en donde asesinaron a 28 personas, quemaron casas,
motocicletas y vehículos.
Tras la masacre y posterior ocupación paramilitar de la zona, se generaron diversos daños y
pérdidas que no sólo afectaron la economía de los habitantes del poblado, sino que
modificaron sustancialmente la vida de campesinos, afrocolombianos e indígenas que
habitan el sector.