Mateo 25
31 »Cuando el Hijo del Hombre venga en su gloria y todos los ángeles con él, entonces se sentará sobre el trono de su gloria; 32 y todas las naciones serán reunidas delante de él. Él separará los unos de los otros, como cuando el pastor separa las ovejas de los cabritos; 33 y pondrá las ovejas a su derecha y los cabritos a su izquierda.
34 »Entonces el Rey dirá a los de su derecha: “¡Vengan, benditos de mi Padre! Hereden el reino que ha sido preparado para ustedes desde la fundación del mundo. 35 Porque tuve hambre, y me dieron de comer; tuve sed, y me dieron de beber; fui forastero, y me recibieron; 36 estuve desnudo, y me vistieron; enfermo, y me visitaron; estuve en la cárcel, y vinieron a mí”. 37 Entonces los justos le responderán diciendo: “Señor, ¿cuándo te vimos hambriento y te sustentamos, o sediento y te dimos de beber? 38 ¿Cuándo te vimos forastero y te recibimos, o desnudo y te vestimos? 39 ¿Cuándo te vimos enfermo, o en la cárcel, y fuimos a ti?”. 40 Y respondiendo el Rey les dirá: “De cierto les digo que en cuanto lo hicieron a uno de estos mis hermanos más pequeños, a mí me lo hicieron”.
41 »Entonces dirá también a los de su izquierda: “Apártense de mí, malditos, al fuego eterno preparado para el diablo y sus ángeles. 42 Porque tuve hambre, y no me dieron de comer; tuve sed, y no me dieron de beber; 43 fui forastero, y no me recibieron; estuve desnudo, y no me vistieron; enfermo y en la cárcel, y no me visitaron”. 44 Entonces le responderán: “Señor, ¿cuándo te vimos hambriento, o sediento, o forastero, o desnudo, o enfermo, o en la cárcel, y no te servimos?”. 45 Entonces les responderá diciendo: “De cierto les digo, que en cuanto no lo hicieron a uno de estos más pequeños, tampoco me lo hicieron a mí”. 46 Entonces irán estos al tormento eterno, y los justos a la vida eterna.
En las últimas enseñanzas el Señor nos ha advertido sobre estar preparados para el día que él venga por su iglesia y ahora nos anima a que hagamos buenas obras.
Lo sobrenatural de ayudar, apoyar y de dar a alguien que no tiene y que está en necesidad es algo muy especial porque el señor mira cada acción de bondad que hagamos por alguien.
Hoy en día vemos cómo las personas por su afán de buscar posiciones y acumular riquezas buscan la forma para dar o ayudar a otros por conveniencia. Pero el Señor aquí nos enseña que cuando estemos ante su presencia Él va ha tener en cuenta las veces que le dimos la mano uno de sus hermanos pequeños, o sea al menos poderoso o reconocido, al que no nos puede devolver el favor, o que es débil o difícil de tratar por causa de heridas que sufrió en el pasado y necesita mucha tolerancia y comprensión para guiarlo con paciencia hacia la sanidad del corazón. ¿Porqué? Porque es como si hiciéramos con él mismo!
Ya el Señor lo había enseñado. En el capítulo 10 de Mateo
Mateo 10:42
Cualquiera que dé a uno de estos pequeñitos un vaso de agua fría solamente porque es mi discípulo, de cierto les digo que jamás perderá su recompensa”.
Dónde comenzar? comienza por tu familia, sirviéndoles.
Desde ayudar en los quehaceres de la casa a tus padres, visitando a un anciano, invitando al hogar a un joven al que sus padres son ausentes en su vida, cuidando en el bebé o los hijos por unas horas a ese matrimonio que tienen conflictos para que saquen tiempo como pareja y se restaure ese matrimonio.
Comienza dando ese vaso de agua.
Que el Señor bendiga la obra que vas a hacer por alguien hoy.