Nos sucede que tenemos grandes sueños en la vida pero hay momentos en que sentimos que no podemos conseguir lo que Dios nos ha llamado a hacer, que no conseguiremos las cosas para las que nos hemos preparado. Perdemos el enfoque de Dios y colocamos la mirada en otras cosas. Aprendamos juntos estos principios que nos van a ayudar a mantenernos enfocados.