Dos hombres tratan de prender fuego a la casa de un tercero que se encuentra en el interior, éste se levanta de la cama alarmado por la gasolina que vierten por una de sus ventanas y usa una lanza que provoca la muerte de uno de los agresores. ¿Defensa propia? Le han caído más de dos años de prisión. Lo comentamos con Alfredo Perdiguero.