A veces, solo se necesita un primer impulso para que las ideas sencillas inspiren a los demás y generen grandes transformaciones. Les contamos cómo una iniciativa empresarial ha desencadenado una espiral de bienestar que ha llegado hasta los rincones más remotos de la geografía colombiana. En últimas, este episodio es una prueba de que no hay acciones pequeñas, de que cada cambio suma en una transformación que nos convoca a todos y de que todos podemos generar una cadena de favores desde nuestra cotidianidad.